¿Qué fue la Santa Inquisición?

La Santa Inquisición, fue un tribunal eclesiástico que persiguió la herejía.

La palabra Inquisición tiene su origen en el latín “inquiro”, que significa buscar, e “inquisito”: búsqueda. 

Su misión era buscar y castigar a los herejes. Es necesario aclarar que no existió sólo una Inquisición, aunque las más conocidas fueron dos:

La Inquisición Medieval que estuvo bajo el mando directo del Papa, y sus orígenes están en la persecución de los cátaros o albigenses, quienes eran considerados sectarios por criticar los excesivos lujos de la Iglesia.

La Inquisición Española: Este Tribunal perseguía a los “judaizantes” (judíos convertidos al cristianismo que secretamente mantenían sus tradiciones). Ésta, a diferencia de las demás inquisiciones, estuvo al mando del Estado, y comenzó con los Reyes Católicos en 1478 y se disolvió por completo en 1834.

Existieron otras cuantas como la portuguesa y la romana, ambas bajo la autoridad del Papa. 

¿Bastaba un rumor para acusar a alguien?

Si bien es cierto que los procesos de la Inquisición se alejaban del Derecho Romano y del conocido procedimiento acusatorio (en el que las partes, acusado y perjudicado, presentaban pruebas a un juez y éste decidía en favor de uno o de otro), la mayoría de las veces el Tribunal buscaba que una acusación tuviera, por lo menos, dos quejosos para poder iniciar un proceso, y éste era muy largo.

Los riesgos del Diezmo

Aunque no podemos generalizar, la mayoría de las iglesias –un 90%–, se escudan en la Santa Biblia para desangrar a sus “fieles”, y la única que recibe ofrendas voluntarias para “sostenerse”, aunque los Santos Sacramentos, tienen en algunos casos, costos onerosos, es la Iglesia Católica.

Estas malas acciones de los voraces pastores, se convierte en estafa colectiva cuando el pastor –en sus cultos–, le ordena a sus “fieles” renunciar a sus bienes materiales, cayendo en el descaro y atrevimiento de pedir que les escrituren sus casa, les entreguen sus autos, fincas y demás propiedades, según ellos “porque el Señor las necesita”.

En el “Imperio del Terror” se le siguió la pista a algunas iglesias y sectas donde se realizan “misas de sanación” con payasos y enfermos de mentira, los cuales eran “milagrosamente sanados”. No es nuestra intención denunciar a nadie, pero vale la pena conocer estas historias reales que se relatan en “El Imperio del Terror” para analizar y tomar una decisión sobre si vale la pena ir o no a una de estas iglesias.